Trigo HB4 tolerante a la sequía es aprobado en Paraguay

Este trigo HB4 modificado genéticamente se logró al insertar el gen HB4 proveniente del girasol, desarrollado por Raquel Chan, biotecnóloga argentina afamada en Latinoamérica. 

Así mismo, el trigo HB4 fue sometido a una evaluación rigurosa que confirmó su seguridad y ya ha sido aprobado en 10 países. Uno de ellos es Estados Unidos que apenas el año pasado concluyó positivamente una primera evaluación de seguridad sobre el transgénico argentino. Conoce más aquí: Trigo HB4 argentino fue evaluado positivamente por la FDA de EE.UU.

Trigo HB4, el OGM que se suma a la lista en Paraguay
 

Desde 2015 Bioceres, empresa dueña de la tecnología HB4, presentó la solicitud a la Comisión Nacional de Bioseguridad Agropecuaria y Forestal (CONBIO) para que Paraguaytambién se beneficiara de ese desarrollo y en mayo de este año lo ha conseguido. Esto es importante debido a que en el proceso de los desarrollos biotecnológicos, la regulación puede frenar e incluso retrasar los beneficios de emplear una tecnología alcanzada y demostrada.

En este caso, el gen HB4 ayuda a que las plantas de trigo ignoren la carencia de humedad en el suelo para que puedan seguir desarrollándose y cumplir su proceso productivo.

Optar por desarrollos con tecnología HB4 en Paraguay no es una novedad sino una necesidad. Eso lo demuestra la aprobación de la soja transgénica tolerante a la sequía y resistente a herbicidas. A estos dos productos se les suman el maíz y el algodón genéticamente modificados (GM). 

Adicionalmente, el país suramericano con el Instituto de Biotecnología Agrícola (INBIO) realizaron un estudio sobre el rol que han jugado los cultivos GM en su agricultura, encontrando que han impactado positivamente en el manejo y conservación del agua y el suelo, y han reducido las emisiones de carbono por menos uso de combustible.

Tolerancia a la sequía: una necesidad del presente y el futuro
 

Cada vez la sequía se convierte en un problema más serio. Por eso, la biotecnología le apunta a desarrollos en plantas que ayuden a tolerar la carencia de humedad. El objetivo principal es mitigar la afectación a la producción de alimentos, que en último repercute en la seguridad alimentaria. 

En el caso del trigo, las altas temperaturas en la etapa de floración pueden afectar el desarrollo de las plantas. Al superar los 27,8 grados centígrados las plantas comienzan a sufrir estrés por calor. A temperaturas superiores a los 32,8 grados centígrados, las enzimas importantes del trigo comienzan a descomponerse. Es ahí donde el trigo HB4 aporta sustancialmente al panorama de sequía, por eso muchos países han adoptado esta tecnología.

Puedes conocer más de cómo el trigo HB4 representa una ayuda a la seguridad alimentaria en países como Australia y Nueva Zelanda. Lee más aquí: Australia y Nueva Zelanda abren las puertas al trigo HB4 argentino