El rol de la biotecnología para evitar la pérdida y desperdicio de alimentos
Mar, 19/05/2020 - 18:35
La pérdida y desperdicio de alimentos sucede en la cadena de suministro, en donde cada detalle cuenta. Una mala cosecha, un almacenamiento inadecuado o un producto mal empacado, rompe este ciclo.
Esto se agudiza en momentos inesperados como, por ejemplo, una pandemia como la que estamos viviendo en esta época en donde varios factores como la el el bloqueo del tránsito aéreo y terrestre o los pocos trabajadores, afecta la cadena de suministro, ocasionando grandes pérdidas de alimentos.
Según National Geographic, con la crisis mundial que estamos viviendo los restaurantes, las escuelas, los servicios de catering y las cafeterías corporativas se vieron obligados a cerrar y desechar gran parte de sus alimentos altamente perecederos.
Por otro lado los consumidores, temerosos de no tener nada en sus neveras durante el confinamiento y bombardeados con noticias sobre escasez y fluctuación en los precios, han terminado por acaparar los supermercados y llenar sin medida sus neveras con alimentos, que terminaron dañándose o tirados en la basura.
La cantidad de alimentos que perdemos y desperdiciamos representa, ahora más que nunca, una amenaza evidente a nuestra seguridad alimentaria. Por eso queremos que conozcas sobre el tema y, sobre todo, que sepas cuál es el papel de la biotecnología para evitar este desperdicio.
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¿Qué significa la pérdida y desperdicios de alimentos?
Si bien ya sabemos que la pérdida y desperdicio de alimentos sucede dentro de la cadena de suministro, es importante aclarar que estas dos ocurren en diferentes etapas.
Por un lado, cuando hablamos de pérdida de alimentos nos referimos a todo lo que pasa en el proceso del ciclo “del campo a la mesa”. Es decir, desde que se siembra el producto hasta el punto en que está disponible en el supermercado. En este proceso se incluye a los agricultores, productores y proveedores.
Por otro lado, el desperdicio de alimentos es lo que sucede después de que llega al supermercado. Aquí incluye las tiendas, supermercados, restaurantes y consumidores.
¿Cómo perdemos y desperdiciamos nuestros alimentos?
La pérdida de los alimentos comienza en los cultivos. La sequía, enfermedades, las plagas y las malezas son las principales causas de esta problemática.
Otra de las causas son los desastres naturales. Por ejemplo, entre 2005 y 2015, los agricultores perdieron alrededor de $96 mil millones en cultivos y ganado como resultado de inundaciones, tsunamis y otros eventos catastróficos. Instalaciones inadecuadas de almacenamiento o tránsito, son otras variables en donde se pierden los alimentos.
También los supermercados desperdician los alimentos, que según ellos, no tienen una buena forma, tamaño o color. Por ejemplo en el Reino Unido, donde los grandes minoristas representan el 85% de la cuota de mercado, el 25% de las manzanas, el 20% de las cebollas y el 13% de las papas se desperdician por razones estéticas.
Por su parte, los consumidores a menudo tiran la comida porque consideran que no es agradable a su gusto, pasó la fecha de vencimiento o simplemente, se daña en sus neveras, como está sucediendo actualmente, que compran demasiada comida por el miedo a la escasez de alimentos por la crisis mundial.
¿Y qué está haciendo la biotecnología para evitar esto?
En este momento los agricultores tienen más presión que nunca para producir más y mejores alimentos. La biotecnología vegetal moderna les permite aumentar la rentabilidad, la productividad y la sostenibilidad de sus cultivos.
Cultivos más resistentes a las plagas, protección contra las enfermedades y malezas, y que sean resistentes al cambio climático, como a las largas sequías o inundaciones, hacen que disminuya considerablemente la pérdida de sus cosechas y de alimentos.
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Por otro lado, el hombre con ayuda de la ciencia ha mejorado los alimentos, lo que ayuda a no desperdiciarlos. Es así que ya contamos con variedad de alimentos con mejor sabor y aspecto. Es el caso del maíz, que antiguamente era pequeño y con pocos granos; o el aguacate que era muy pequeño y tenía una pepa muy grande que dejaba poco espacio para la pulpa. Mira en este video otros alimentos que han mejorado con el tiempo.
De igual forma, científicos e investigadores han puesto todo su esfuerzo, para desarrollar alimentos con innovaciones que mejoran la nutrición, calidad y aspecto. Estos avances ayudan a que los consumidores puedan disfrutar de estos alimentos por más tiempo, sin desperdiciarlos.
Es el caso de la Manzana Artic que fue genéticamente modificado para silenciar (apagar) los genes de las enzimas responsables del pardeamiento. Es decir, que esta manzana puede ser cortada y expuesta al aire libre por más tiempo sin cambiar su aspecto y sus propiedades.
Otro caso de mejoramiento de los alimentos es el desarrollo de una papa en donde se logró editar el gen polifenol oxidasa, responsable del pardeamiento en las papas cuando se cortan y se les exporne al aire libre. La técica en este caso, fue la edición genética o CRISPR/Cas9, que consiste en realizar cambios dirigidos en el material genético de las plantas con el objetivo de mejorar una característica especial.
Desarrollo de una papa realizada por los investigadores del INTA Balcarce
Mira esta infografía sobre el tema.
Este artículo se hizo con información publicada en Crop Life International:
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